Yo te veía
en camino tu vienes
en casa yo te espero
con el sol a mis espaldas
y la noche por nacer
aguardo por ti...
Y no sé dónde estarán tus pensamientos
al menos los míos te buscan
son como cometas dando brazadas
al viento
buscando aliento mientras tú
regresas a mí.
Y no volví a ver la lluvia
como la tristeza que acaricia la espalda
en esas tardes de sepia
consolando la nostalgia que pregona
su existencia.
Y así te tengo en mi vida
como la pausa que me suplió de aire
mientras dejaban de temblar mis manos.
Yo te veía
apoyando tu cabeza en la ventana
mientras tu mirada se reflejaba en el cristal
yo te veía
y apacible voló tu mirada en las lejanías
desatando mis cumplidos por tu armonía
la que amo sin cordura y me rindo
pues no tengo fuerzas para esperar
más por tus besos.
Aún no sé dónde están tus pensamientos
pero me deleito recordando tu sonrisa.
Quisiera ser abrigo en tu camino
estar a tu lado
amanecer contando los destellos de luz
que iluminan tu belleza
quisiera ser el pasajero sorprendido
aquél que no quita su mirada
pues no se espera que en este mundo
exista una mujer con tal lirismo.
La noche no es ingrata
aún no llegas, pero
revoloteas en mi alma
y tus alas poco a poco te acercan
a mí
quien entre letras y versos
mi amor descubre que no teme al frío
estás tú conmigo
están tus alas tocando
en mi ventana
y zigzagueante en la brisa
esta mariposa predice
que tu amor se aleja del horizonte
y a pocas leguas te encuentras
de este
tu poema...
tu poema...
02/04/2018. Imagen Web.
JEOM
No hay comentarios.:
Publicar un comentario