Yace el invierno crudo de tu ausencia
solsticio a menguar en la viejas hogueras del tiempo
y a su vez cantaba el difunto con sus ríos
de trova ahogadas alrededor de la luz
de las cósmicas emociones a la lumbre
de tus ojos.
Bebía sediento de tus labios
el árido hedor de tu partida
era solo un recuerdo
relataba el sol
cuando aún brillaba en el cosmos.
Y por años una hoguera iluminó tu cuerpo
encendida de belleza y leños
fuego de invierno
el más necesitado...
Y con las cenizas pintaba tu cuerpo
con ojos de otro tiempo
con miradas que guardan secretos
con el bailar sagrado de tus manos
imputadas de rituales en la piel
de mejillas sonrojadas y gemidos
todos y cada uno convocados
en la iniciación de esta adoración.
Absorbido por tu alma
por la risas incautadas
por la niebla que encegueció mi corazón
he roto el silencio que por tiempo me desveló
despierto izo tu recuerdo
en jardines y palabras
iconos de la naturaleza
y del corazón...
29/03/2017 Imagen Web
JEOM
Hermosa poesía llena de nostalgias pero encantadora y es todo un gusto poder pasearme por tus jardines nuevamente. Has crecido mucho y hasta parece otro diferente al que leí hace mucho. Qué bien! Grandioso. Un abrazote lleno de ternura.
ResponderBorrarBuenas tardes, Rosy! gracias! muchas gracias. Y sí, uno no es el mismo después de tanto y de tanto... El placer y honor es mío de encontrarte por aquí. Gracias! Cuídate mucho! un fuerte y cariñoso abrazo, Rosy. Siempre bienvenida!
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